Última carilla de la bitácora que narra fidedignamente las aventuras que acontecieron a Vinagre y a Gengibre un día en que los sorprendió el temporal.



Nota: Cuando despertamos enjaulados había cesado la lluvia.
Nota: Los acróbatas son gemelos
Nota: Tengo hambre
Nota: Los acróbatas hacen trampa
Nota: Perdí otro dedo fastidiando a las cacatúas
Nota: El guacamole no debe prepararse con taaaanto tomate
Nota: ¿Mr PacMan se empastillaba?
Nota: ¿PacMan se escribe así?
Nota: El té de los cafés brasileros no tiene nada de especial
Nota: Mañana abre el cine Universidad
Nota: No olvides pasar a buscar la bicicleta por la mañana
Nota: Me duele el pie
Nota: Estamos haciendo uso y abuso de las “Notas:” (LIBERTAD DE EXPRESIÓN)
Nota: No me entran más notas
Nota: Ay! Tan solo una pequeñita...

(verticales)
Nota: Encontré más lugar para escribir notas
Nota: Extrañamos a Carmencita
Nota: Un detective nos preguntó por ella, seguramente está sobre la buena pista

FIN

2 comentarios:

Mati dijo...

mmm,

Primero: PacMan si se empastillaba, y cdo se le pasaba el efecto, le pegaba la paranoia mal y creía q lo perseguían varios fantasmas de colores.

Segundo: ¿Se acabó?

Nota: ¡¡¡Notas por todos lados!!!
Nota2: invaden mis escritos, los superan, los oprimen
Nota3: ... Llega finalmente un momento en que las notas cubren el papel.
Nota4: Finalmente, no contentas con consumir mi espacio, invadirlo, trocarlo en el suyo propio, lo saturan
Nota5: Mutan, se convierten impúdicas en dibujos, para luego degenerar en garabatos.
Nota6: Una mancha de tinta. Ambos perdimos; yo mi espacio, ellas su identidad. Y así, ya no son mas.

Memo: ¡Oh! ¿No hay paz para las líneas mientras yo tenga mis papeles?

Vinagre dijo...

Mmm... interesante experiencia con las notas.
Procure, señor Matue, llegar a acuerdos diplomáticos con las mismas antes de llegar a situaciones catastróficas.